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Brandon Vera, la promesa que nunca ha explotado

Este próximo sábado, 4
de agosto
, en la cartelera UFC on FOX
uno de los protagonistas de la pelea principal es Brandon Vera (12-5-1), quien se enfrenta al brasileño Mauricio “Shogun” Rua (20-6), en una
pelea que puede significar su ascenso a la cima que al comienzo de su carrera
parecía estar cerca, pero que se ha ido alejando con el paso de los años.

Vera tiene ante sí este sábado la oportunidad de
desterrar los fantasmas que siempre le han perseguido en su carrera y que han
dejado la gran promesa del comienzo en apenas un sueño que parece inalcanzable.

El peleador nativo de Virginia comenzó sus andares en las
Artes Marciales Mixtas (MMA por sus
siglas en inglés)
en el 2002 y ya en el 2005 se coronó campeón del torneo pesado del WEC, instante este en que abrió los
ojos de muchos con esa gran actuación.

Más adelante, en el 2006, vino su mejor momento al vencer por nocáut en el mismo primer
asalto nada más y nada menos que a Frank
Mir,
en el UFC 65, y ahí parecía
que no había límites para este peleador que prometía mucho y que hasta llegó a
decir que quería ser el primero en ser campeón en los pesos pesado y semipesado
a la misma vez, teniendo en cuenta que podía pelear en ambas divisiones sin
muchos problemas. Y de la manera en que él había
peleado hasta ese momento, muchos pensaban que eso era posible, muy posible.

Además, antecedentes y
similitudes con esa idea ya han existido, con Dan Henderson en Pride, Randy Couture y BJ Penn en el UFC.

No sólo era que ganaba, sino la
manera en que lo hacía. En sus primeras cuatro peleas en el UFC, acabó con sus
rivales con nocáuts y sumisiones y a Mir, simplemente, lo destrozó en apenas 69 segundos.

Pero fue ahí, precisamente, donde
su carrera comenzó a moverse como una montaña rusa y las derrotas fueron mucho
más significativas que los triunfos, lo que lo alejó de las peleas titulares.
La gran promesa de Vera no cumplía con las expectativas de los primeros años.

Tras el nocáut sobre Mir,
vinieron dos fracasos consecutivos ante Tim Sylvia y Fabricio Werdum, lo que provocó su paso definitivo a la división
semipesada, en la cual se sentía más fuerte y era un peleador que no estaba en
desventaja ante sus rivales, ni en peso ni en tamaño ni en fortaleza física.

Los resultados, sin embargo, no
le favorecieron y, como dije anteriormente, una montaña rusa se apoderó de su
carrera; saltos y sobresaltos, subidas y bajadas, victorias y derrotas. Todo
menos estabilidad y buenos resultados. Nada que ver con aquel peleador que tomó
el UFC por asalto desde su debut en el 2005.

En el 2009, tuvo una gran oportunidad de encaminar su carrera cuando se
enfrentó a Randy Couture en el UFC 105
en Inglaterra, pero una decisión algo controversial de los jueces no le
favoreció y la columna de las derrotas sumó otro fracaso.

El año siguiente perdió ante el
que era en aquel momento el mejor prospecto de todo el UFC y las MMA, Jon “Bones” Jones, y el panorama tomaba un tono bien feo, no por
esta última derrota ante el fenómeno Jones, sino porque no lograba acumular
triunfos. En el 2011 sufrió otro revés, esta vez ante el brasileño Thiago Silva en el UFC 125, lo que provocó su salida del UFC tras tres fracasos al
hilo.

Sin embargo, una suspensión del
sudamericano a causa de un examen alterado de orina le dio otra oportunidad de quedarse
en el UFC y tras un triunfo en el UFC
137
ante Eliott Marshall, tiene
ahora la posibilidad de recuperar de un solo golpe todo el terreno perdido en
estos años.

Inicialmente, él no era el rival
de Rua, pero tras la negativa de “Shogun” de pelear contra su paisano Glover Teixeira, las puertas se le
abrieron a Vera, quien, después de todo este tiempo sin brillar, es ahora parte
de la pelea principal de una cartelera que va por televisión abierta en la
cadena FOX, lo que le brinda una
ventana única para recuperar su prestigio como peleador y demostrar que puede
pelear y destacarse en el UFC. No creo que sea necesario ganar, aunque sí es
importante dar una buena presentación. Y como es parte del combate estelar,
tiene cinco asaltos para lograrlo, 25 minutos.

Las condiciones siempre las ha
tenido, como también el hecho de entrenar en San Diego en el Alliance Gym (uno de los más
renombrados en todas las MMA), el
mismo gimnasio donde entrena el actual campeón gallo, Dominick Cruz, y también otro de los mejores semipesados, Phil Davis. Sin dudas, la compañía que
tiene todos los días es de altos quilates y va a necesitar de la ayuda de ellos
y de sus entrenadores para este reto que se le avecina.

La tarea no es nada fácil, pues
ante sí tiene a una leyenda viviente que viene de una gran pelea ante Dan
Henderson en el UFC139 en noviembre
pasado y que cada vez que entra al octágono lo hace con malas intenciones para
sus rivales (Lyoto Machida, Quinton “Rampage” Jackson, Chuck Lidell, Mark Coleman, Alistair
Overeem
y Forrest Griffin son
prueba de eso).

Todas las papeletas le favorecen
a “Shogun”; experiencia, pegada, calidad, etc., pero ya sabemos que en este
deporte de las MMA un golpe en
cualquier momento puede decidir un combate. Esto lo hemos visto muchas veces
como para dudar que pueda ocurrir.

Este 4 de agosto, Brandon “The Truth” Vera tiene la oportunidad dorada
de revertir el camino que ha tomado su carrera en los últimos años y,
finalmente, enderezar ese barco que desde que salió del puerto ha estado
encontrando tormentas en el mar sin poder atracar en un puerto seguro.

La última palabra la tiene él
este sábado en el octágono del Staples
Center
en la ciudad de Los Angeles
ante una de las leyendas vivientes de las MMA,
uno que de sólo mencionar su nombre, multitudes de fans se agolpan para verlo
pelear.

Sólo le queda demostrar a Vera que
sí se puede.

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@vikingomartell