Pablo Garza listo para pelear en Suecia

Garza
es hijo de mexicanos que reside en Fargo, Dakota del Norte, lugar poco común no
sólo para mexicanos, sino para latinos, en general. Sin embargo, él nos dijo
que aún reside ahí porque tiene a sus padres y porque le gusta, aunque ha
pensado en mudarse a lugares más calurosos.

“He
pensado en irme a California, donde tengo familia, o a Florida, pero no me
decido”, fueron sus palabras cuando le pregunté sobre el tema, sobre todo al
conocer las frías temperaturas de esa zona, gélidas hasta más no poder y por
gran parte del año.

Pablo
comenzó muy bien su carrera en el UFC
con dos triunfos consecutivos, pero tras esto, llegaron dos fracasos al hilo y
una victoria en su última cita podría ser el comienzo de una racha positiva para
un peleador que ya se ha llevado premios de Pelea y de Sumisión de la noche.

En
este momento en que tiene tan cerca el olor de las derrotas, Garza hizo algunos
cambios a su preparación habitual y se fue al sur de Florida al gimnasio de
American Top Team para enriquecer sus conocimientos de Artes Marciales Mixtas (MMA por sus siglas en inglés). Ahí entrenan
muy buenos peleadores, como Thiago Alves,
Héctor Lombard y Gleison Tibau, entre otros.

Sin
dudas que este tipo de experiencia enriquece el espectro deportivo de cualquier
peleador de MMA y en un momento en
que necesita despegar y viendo la actualidad del UFC, con tantos buenos peleadores (cientos de ellos), hay que ganar
para mantenerse en el roster de la organización.

Las
exigencias actuales obligan a ganar y a brillar. Lo primero sólo no basta. “Me
he preparado muy bien y pienso que puedo ganar de cualquier manera, con
sumisión o con nocaut”, dijo cuando le pregunté sobre la manera en que podría
salir triunfador.

Ante
sí Garza tiene a un experimentado peleador brasilero, Brandao, ganador del The Ultimate Fighter en diciembre pasado,
con muy buen jiu-jitsu y muay thai y que entrena en Nuevo México
en el renombrado gimnasio de Greg Jackson. De sus 16 victorias, 13 han sido
antes del límite. Es decir, él se enfrenta a alguien que sabe cómo pelear, cómo
ganar y cómo terminar los combates antes de tiempo.

Pablo
tiene la ventaja en estatura y en alcance, pero ya hemos visto que en las MMA esto no es necesariamente el factor
decisivo para llevarse el triunfo. Se suma todo, coraje, experiencia,
habilidades, suerte y más.

“Estoy
confiado que el 6 de abril voy a
salir con la victoria”, fueron sus palabras cuando le pedí una predicción antes
de terminar la entrevista.

Ya
veremos cómo lo trata la casi siempre fría Estocolmo que, al menos por un día,
va a estar bien caliente, sobre todo dentro del octágono.

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