
UFC Unfiltered
Nick Diaz
reaparecerá el sábado 16 de marzo, dejando atrás una inactividad de más de un
año en la pelea estelar de UFC 158. Del otro lado del octágono lo espera Georges
St-Pierre, el campeón más dominante en la historia de los pesos welter,
invicto en sus últimos seis años de carrera y con 10 peleas ganadas de forma
consecutiva.
St-Pierre
tiene la sangre en el ojo por toda la provocación que ha estado soportando
desde aquellos tiempos en que Díaz era campeón de Strikeforce y ya
deslegitimaba al campeón con insultos y agresiones verbales. GSP vs Díaz, un
choque de estilos y personalidades.
Para un
hombre acostumbrado a competir frecuentemente, la inactividad puede ser un
factor determinante en el rendimiento. Nick Díaz ha mantenido un ritmo
constante de tres combates anuales y este ha sido el período de inactividad más
largo de su carrera. La sensación de competir dentro de un octágono es algo
especial, difícil de replicar en un entrenamiento. El llamado ¨ring rust¨
(oxido de ring) es un término acuñado en inglés para describir la situación que
atraviesa un luchador en su regreso a la actividad luego de un parate
prolongado. Para algunos atletas, la inactividad puede ser una pesadilla, mientras
que para otros como Nick Díaz, puede ser una oportunidad para recuperar un
cuerpo que ha recibido abuso durante más de una década:
¨No creo
haber estado nunca al 100% llegando a un combate. Todas las peleas de estos
últimos años han sido bastante seguidas. No creo haber estado plenamente
recuperado antes de comenzar un nuevo campamento de entrenamiento. Es bueno
tomarse un tiempo, recuperarse y mirar las cosas en perspectiva¨ explica Díaz
en referencia a su larga ausencia del octágono.
El ¨ring
rust¨ puede ser, en algunos casos, una cuestión más mental que física. Un
luchador profesional del UFC debe hacer frente a una serie de compromisos que
van más allá del propio combate, como por ejemplo, una conferencia de prensa,
el corte de peso, el pesaje que comienzan a ser percibidas como un hábito o por
lo menos como parte de una rutina cuando se vuelven periódicas, frecuentes y
predecibles. Los atletas exitosos suelen cumplir con una rigurosa rutina que,
por lo general, cumplen a rajatabla. Es lógico que cuando esta rutina se corta
durante un tiempo prolongado producto de una lesión u otro padecimiento, la
mente deje de percibir estas situaciones como normales o habituales. Esto es un
claro síntoma del ¨ring rust¨.
Por
supuesto, no debemos cometer el error de generalizar cuando hablamos de los
efectos del denominado óxido de ring, o mejor dicho ¨óxido de octágono¨.
Algunos como Chael Sonnen o Rashad Evans han desmitificado lo dicho
anteriormente, dando grandes performances tras prolongados períodos fuera del
octágono. Sonnen volvió de un año de suspensión para enfrentar a Brian Stann en el UFC 136. Chael dominó
e impuso su preponderancia física para someter a su rival en la que fue una de
sus mejores actuaciones. Otro caso paradigmático es el de Rashad Evans y su
presentación en el UFC 133. Rashad llegaba a la revancha con Tito Ortiz dejando atrás un letargo de
15 meses como resultado de lesiones y otros infortunios. Evans lució
fantástico, noqueando a Tito en el segundo asalto.
Uno de
los que sí puede dar fe de los efectos del ¨ring rust¨ es el mexicano Cain Velasquez. Cain sufrió una lesión
en el hombro en su pleito frente al entonces campeón, Brock Lesnar. Una año más tarde, Cain debía defender el cinturón
por vez primera frente al retador Junior
Dos Santos. Caín llegó con 10lbs arriba de su peso habitual y se mostró un
tanto letárgico en aquel combate en donde perdió el título de los pesos
completos. Cain evidenció por experiencia propia que el ¨ring rust¨ no es una
realidad.
Mito o
no, el debate siempre estará instalado. Nick Diaz admite estar preparado para
este combate y no parece estar preocupado por su inactividad de cara a este
encuentro. ¿Uds que opinan, el ¨ring rust¨ es realidad o mito? Hagan su elección.