Lo mejor del UFC Fight Night 25

Los estelares de la noche fueron directamente al
cruce desde el inicio del combate e intercambiaron golpes con malas intenciones.
Shields, consciente de su inferioridad en la lucha de pie, intentó un par de
derribos fácilmente defendidos por un Ellenberger que lució en
excelente condición física y más potente que su rival. Cuando el pupilo de
Cesar Gracie intentó acortar la distancia, Ellenberger fue aún más astuto y
utilizó el clinch de muay thai para propinar un par de rodillazos al mentón desplomando a Shields. Sin dubitaciones, Ellenberger apretó el gatillo
y con una serie de martillazos de izquierda obligó al réferi a intervenir,
dando por finalizado el combate. Shields, aún conmocionado por los repetidos
golpes a la cabeza, se aferró de la pierna del árbitro como si éste fuera su
oponente. Excelente intervención del réferi protegiéndo la integridad física
del luchador, reconociendo que Shields ya no se estaba defendiendo de forma
inteligente.

Para Ellenberger, esta fue la victoria más
importante de su carrera profesional por el nivel del rival.
Shields sólo había sido noqueado una vez en su carrera por lo que esta hazaña
toma aún más valor. Además Ellenberger fue acreedor a un
cheque por 55 mil dólares por el Nocaut de la noche. Todo parece
indicar que el próximo rival del de Nebraska saldrá del enfrentamiento entre
Nick Díaz
y Bj Penn.

En otro de los combates de la noche, el talento se
hizo presente de la mano de Alan Belcher quien se reencontró con la victoria luego de una
prolongada inactividad producto de una seria lesión que afectó su visión. El canadiense
Jason MacDonald creyó tener la ventaja llevando la lucha al
suelo, pero se encontró de espaldas con un Belcher agresivo que
utilizó el golpe a ras de lona y una serie de codazos para quebrar la voluntad
de su rival quien se rindió verbalmente. Visiblemente emocionado, Belcher cree
que éste es el inicio de una nueva etapa:

¨No sabía si iba a volver a pelear de nuevo y esta
noche sé que ésto es lo que quiero hacer. Quiero ir por ese cinturón. Estoy
devuelta¨.

Lance Benoist y Matt Riddle protagonizaron la Pelea de la noche y también
recibieron sus respectivos bonos. Benoist mostró un boxeo depurado y patadas de Taekwondo, rara vez vistas dentro del octágono. Riddle por su
lado, trató de utilizar su ventaja en envergadura física para desgastar a su
oponente y llevarlo a la lona. Una vez allí, el de Pensilvania, trató de
mantener las posiciones dominantes sin propinar demasiado castigo. Benoist por
su lado, se mantuvo activo con la Guardia de goma popularizada por Eddie
Bravo (en la cual estando de espaldas con una mano sujetas tu pierna contraria, impidiendo que tu rival gane distancia y te golpee, y manteniendo la otra mano libre), y, de espaldas a la lona, amenazó constantemente con sumisiones. En el
primer asalto, con gran destreza, utilizó la kimura para revertir la posición y
pasar a montada completa. Un interesante duelo que tuvo a Benoist como ganador
por puntos en decisión unánime.